jueves, 26 de enero de 2012

¡Se le va la fuerza por la boca!

Ayer por la mañana escuché unas declaraciones de Sr. Artur mas, con ese tonillo nasal, chulesco y altivo que tanta cancha les da a los imitadores.
Decía el Molt Honorable, o avisaba en plan perdonavidas mejor dicho, que Catalunya se ha de preparar para "actos de autoafirmación que romperán las costuras". De nuevo el maldito pacto fiscal como telón de fondo para aprovechar y decir, por esa boquita de piñón, que se puede pasar el Estatut y la Constitución por el forro. Según él los actos de autoafirmación que se puedan derivar se podrán interpretar por algunos como "actos de confrontación". Pues seguramente será así.
Mira, que haga y diga lo que quiera pero lo que no me parece justo es que a los trabajadores de Catalunya, tanto del ámbito público como del privado, nos pida o casi nos exija aceptar los sacrificios derivados de una situación que no nos gusta por el bien de la sociedad y el país, y él se dedique a lloriquear y a amenazar por que algo no le apetece asumir.
La Constitución es la que hay, para lo bueno y para lo malo. Se aprovechan de ella para tener una representatividad parlamentaria en el Congreso de los Diputados, a todas luces injusta si comparas los votos globales con otros partidos de ámbito nacional, pero para otras cosas es peor que Satanás.
El Estatut de Catalunya fue aprobado por los ciudadanos en referendum. El hecho de que se haya presentado recurso de inconstitucionalidad a algunos de los artículos, en principio según recuerdo los relacionados con conceptos identitarios, no quiere decir que todo El sea injusto. La cosa es complicada y como no se mucho de ello no voy a comentar nada más.
Creo que no es el momento para lanzar consignas de confrontación. Estos temas que no le dejan dormir importan poco a la ciudadania de a pie según las encuestas recientemente publicadas (la identidad nacional y todo lo que ello conlleva estaba en los puestos 10-12).
Me gustaría que sus palabras de demanda de sacrificio se las apuntara a fuego y actuara en la misma dirección en la que nos hace ir a los demás. Yo personalmente estoy asumiendo mi rol de estatutaria y trabajadora pública. Está claro que me quejo, pero también intento ser constructiva, y sólo pido que me informen del porqué de los ajustes, y que estos afecten a todos los estamentos y clases de forma proporcional.
Si  el Govern de la Generalitat de Catalunya puede decidir qué y cómo hacer las cosas, aunque sea saltándose la normativa vigente no tendrá poder moral para exigir a los ciudadanos que aceptemos aquello que a nosotros no nos gusta...y le puedo asegurar que hay muuuuuuuuuuuchas cosas que se podrian discutir.
Au Sr Mas, póngase el mono de trabajo, que para decir tonterías ya están los eurodiputados (ver entrada de ayer je,je)

No hay comentarios:

Publicar un comentario