miércoles, 16 de mayo de 2012

¿Médico o secretaria?

Día 8 de mayo de 2012, sobre las 19 horas llamo a una paciente apuntada en la lista. Para vuestra información complementaria deciros que es una señora desplazada. Vive en la zona metropolitana de Barcelona pero pasa algunas temporadas en el pueblo donde yo trabajo (es decir tiene una segunda residencia, cosa que yo no, que debe poder mantener...digo yo)

-"Buenas tardes Dra ¿cómo está Ud?"
- Pues muy bien gracias y Ud.
- "Pues tirando, ya sabe que estoy fatal, me tienen que poner una prótesis y estoy fatal. Por eso vengo. Yo tengo mi receta electrónica, tomo ibuprofeno y me "unto" con Voltaren la rodilla, pero se me han acabado ¿me puede hacer una receta?"
- Del ibuprofeno si, no hay problema, pero el Voltaren en pomada no lo hacemos, es una política de la Gerencia y la Dirección del Equipo.
El siguiente paso es abrir la pantalla de prescripción y mirar la situación administrativa de la Sra. Según la maquinita la receta a colocar es verde. Verde como el semáforo de pase, verde como la col, verde como el campo en primavera, ¡VERDE! Pongo el papel en la impresora, firmo la receta y me pregunta asombrada
- "¿Pero no me la hace roja?"
- ¿Roja? pues no, a mi me consta en el sistema que Ud usa recetas verdes. Giro la pantalla del ordenador hacia ella y su esposo y les enseño la rallita verde.
- ¿Pero es que yo soy pensionista? me dice mientras me enseña la tarjeta individual, y efectivamente pone farmacia gratuita.
Acto seguido les explico, mientras a la vez (si, a la vez, soy capaz de hacer dos cosas al mismo tiempo) introduzco otra receta esta vez roja en la impresora, que debe ser un problema administrativo y que lo deben solucionar ELLOS en su zona de residencia. Dios lo que les dije!!!!
El marido salta como si tuviese un resorte en el culo, "que no hay derecho, que nosotros no tenemos porque pagar, que si esto, que si aquello, que si porqué no lo arreglo yo, que si Catalunya somos todos...."
- ¿Pero no ve Ud que ya tiene la receta roja?, sólo tiene que hacer la gestión.
- "Pero que no, no y que eso, y lo otro...."
- ¡Basta! no tengo porque aguantar más, haga lo que quiera y punto. Lo dije con energía, pero él estaba colorado como un alemán en la playa de Salou, o sea que tranquilito no estaba.
Siguiente punto del día: reclamación al cante.

¿Pues sabéis que os digo? Que la cajita de Ibuprofeno 600 mg 40 comprimidos vale la friolera de 1,97 euros, que si calculamos el 40% de esta cantidad a la Sra le habría tocado pagar 0,78 céntimos. Que no hay derecho a tener que aguantar tanta estupidez en la consulta, que no tengo porque dar explicaciones sobre lo que receto o no, que me da por saco tener que solucionar problemas administrativos (y lo hago cada día porque no tengo personal especifico) que se nos llena la boca de solidaridad de pacotilla pero no podemos asumir pagar 1,97 euros por una caja de medicación, que no se puede aceptar que sólo tengan derechos y no deberes.
No puedo entender este sistema que permite este baile entre consultas para solucionar problemas que no son urgencias, ni tan siquiera son médicos, sin ningún tipo de aportación por parte del usuario.
Que no me da la gana ser la chacha de nadie, que yo soy médico, que esto no es culpa de los recortes, reajustes o llámalo como coño te de la gana. Que tal vez es al revés. Que hemos abusado todos, que hemos pedido, pedido, pedido y pedido sin parar y que ahora no aceptamos un no por respuesta.
Que me molesta que se confunda la bata blanca con una armadura o un kimono que invite a la pelea "por que yo pago" Yo también pago y me asquea su actitud altiva y chulesca y su insolidaridad.
Ya le han contestado, muy bien por cierto y reforzando mi actitud, pero el mal rato y el asco no me lo quita nadie.
Lo único que me consuela es pensar que esto no me pasa con los pacientes habituales, con los que me conocen. Ellos aceptan fármacos no financiados por que yo se los recomiendo. Aceptan que algunos medicamentos (como el Voltaren gel) sólo lo prescriba en situaciones específicas, son personas inteligentes y respetuosas. Ellos quieren un médico y tienen un médico. Los que quieran una secretaria es lo que van a tener
Si no os gusta lo que habéis leído lo siento pero como el Bloguerin 400 me lo pago yo te aguantas.

5 comentarios:

  1. Pues si, tienes razon, por pocos centimos hay cosas que no hay porque aguantar, me pago de mi bolsillo todos los meses el MEDIKINET i el RUBIFEN de mi hijo ( 24 i 6 eurazos )i hoy mi INTIZAN para la ciatica de 11 euros!!! i suma i sigue,hay que cambiar el xip.

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  2. Si xiquet es lo que hay. Oye lo de la ciatica lo podemos mirar si necesitas algo

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    1. Pues llevo 2 meses i nada de nada,sigo igual, molestias desde el gluteo hasta el gemelo y no puedo correr, estoy en reposo crònico, me han dicho pinzamiento interdiscal L5 S1,segun radiografias, he ido 2 veces al osteopata i sigo igual, tengo mal humor.

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    2. ¿No será un sd piramidal? se denomina tambien pseudociatica por algo, puede pasar la rodilla pero no llega al tobillo, dolor desde zona central del gluteo, coméntale al fisio o llámame a la consulta y lo miramos
      Hay que volver a correr!!!!

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  3. Si te sirve de consuelo, esto nos pasa a diario a muchos de nosotros (los que intentamos cambiar cosas, buscar equilibrios entre la justicia social y la personal, entre los derechos y los deberes, entre el bien común y el autónomo, siguiendo los principios de la bioética,...). Has hecho lo correcto, ojalá leyeran tu post. Este país necesita una dosis de empatía y de conciencia social.
    Cada palo que aguante su vela; como médico me responsabilizaré de mis errores pero no del de los otros. No pierdas la fé pues como dices tus pacientes te conocen y respetan. La mayoría serán personas normales y correctas y sabrán entender que lo que buscas es su bien y aceptarán lo que un profesional como tú les dice.
    30 minutos estuve yo hace 2 días discutiendo con una paciente porque me negaba a recetarle un hipnótico que le había suspendido porque ya tomaba otros dos ansiolíticos a la vez. Lo hacía por su salud, la evidencia científica,... pero ella erre que erre. Me planté y le dije "yo no le tengo que recetar lo que usted quiera; es mi trabajo y mi criterio profesional el que decide; si usted no está de acuerdo está en su derecho pero tiene dos opciones: cambiar de médico o comprarse la medicación por su cuenta; yo no seré responsable de los efectos de dichas combinaciones". Y punto!

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