sábado, 12 de enero de 2013

Mi privatización

Escribí el borrador de esta entrada a finales de noviembre de 2012, al inicio del conflicto de la sanidad madrileña. Ahora pasados unos meses, unas huelgas, unas dimisiones y algunas reflexiones más he decidido publicarla. He seguido, desde Catalunya, la #mareablanca. He comentado cositas varias con diversos amigos virtuales. Respeto vuestra posición pero sigo viendo algunas cosas que no me cuadran. Hoy publico mi reflexión después de leer a primera hora de la mañana de un sábado multitud de tuits sobre políticos, privatizaciones y consejeros aprovechados y haber enviado uno donde os invitaba a hacer un reset, parar y empezar de nuevo. Creo que estamos mezclando las churras con las merinas (que ya se que son un tipo de oveja...o eso me dijeron)

En primer lugar quiero dejar bien claro que este no es un escrito contra nada ni a favor de nada, sencillamente plasmo en mi folio virtual las dudas que se me presentan al seguir el movimiento de revuelta sanitaria que esta aconteciendo en Madrid en estos días.
Ya he comentado en otras ocasiones que la participación activa en las redes sociales, en especial en Twitter, me ha proporcionado conocimiento de la realidad de muchos compañeros médicos, farmacéuticos y enfermeros que trabajan en distintos ámbitos de la sanidad.
Con algunos de ellos he entablado una relación más fluida, con desvirtualizaciones físicas que espero se repitan más a menudo y con los que comparto mucho más de lo que me esperaba, pero también es cierto que en los últimos 3-4 días he sentido que algo nos separa y antes de escribir he reflexionado, he leído e incluso he escuchado a las diversas partes implicadas en el conflicto. No la quiero cagar.
Están en los madriles muy alterados por la propuesta de privatización que les ha ha planteado la Consejería. Parece que quieren cambiar la gestión de 27 centros de salud y 6 hospitales.
La primera pregunta que os hago es ¿qué significa privatización?. Si utilizamos el término literalmente se puede entender que los servicios ofrecidos se van a pagar directamente por parte del usuario, y eso si seria ir en contra de la sanidad pública, gratuita (que no gratis) y universal que caracteriza a nuestro sanidad.
Por otro lado si lo que privatizamos es la gestión, es decir, la toma de decisiones, la compra de productos intermedios, la negociación con los finaciadores de la cartera de servicios, la participación del profesional en la organización estructural o incluso el riesgo económico pero también la  recompensa económica...a lo mejor yo me apunto a ello.
Hace unos días acudí a una jornada muy interesante organizada por la Asociación Catalana de Entidades Asociativas (EBAs). La filosofía es la  creación de pequeños equipos de profesionales que pasan a ser un nuevo proveedor de servicios de salud, ofreciendo a su población asignada los mismos servicios que las grandes empresas proveidoras como el Institut Català de la Salut (ICS) o los similares de otras comunidades autónomas. Gestionan, deciden, compran y trabajan dentro del servicio público pero fuera de sus rígidas normas o generando otras propias. Hace tiempo que me interesa el tema.Al taller que hicimos por la tarde acudió un médico madrileño al que habían enviado desde la gerencia única para informarse del tema. Si bien es verdad que hay diferencias en normativas y estructuras el hecho de que estuviese allí puede significar que es esa la opción de futuro.
Si es este modelo el planteado creo que la palabra privatización no expresa la realidad. No se plantea un uso diferente para el paciente, es otra forma de trabajar.
Yo estoy cansada de no poder decidir, de no poder cambiar cosas que no funciona sin hacer una instancia por triplicado. Cansada de no poder pactar con los servicios centrales analíticas o radiología, cansada de estar todos en el mismo saco cuando somos diferentes (ni mejores ni peores, diferentes). Yo quiero hacer mi trabajo sin presiones de estándares de farmacia o calidad decididos por políticos o técnicos que son la voz de su amo. Yo quiero poder plantear una cartera de servicios que cubra lo básico y obligatorio pero que ofrezca un punto de calidad superior y que me distinga en la excelencia (soy Leo, tengo el ego subidito).  Quiero participar de la gestión eficiente de recursos sin basarme en decisiones puramente numéricas o economistas. Me gustaría ser mi propio jefe.
Lo que más me llamó la atención fue que la satisfacción del usuario es altísima, la demora de pruebas complementarias como la radiología es  de menos de una semana (hoy me han programado un tránsito esofagogastroduodenal preferente para enero de 2013...), han implantado novedades en las consultas domiciliarías, en las analíticas..
Se han creado 12 EBAs en 16 años, tras el periodo de prueba (en el que hay vuelta atrás) ninguna ha vuelto al redil del ICS, los profesionales están encantados, inclusos en épocas de crisis...¿por algo será digo yo?
¿Es esto lo que se plantea en Madrid? si es así es para valorarlo. Si lo que quieren hacer la privatización pura y dura esperarme que saco un billete del AVE y me planto aquí en un plis-plas y nos encerramos donde haga falta.




2 comentarios:

  1. Hola Bea, tienes razón cuando dices "Quiero participar de la gestión eficiente de recursos sin basarme en decisiones puramente numéricas o economistas",
    pero una cosa son las EBAs i otra son multinacionales gestoras de servicios sanitarios, ya que estas gestonian para lucrarse. Por què no se intenta mejorar la gestión pública?

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  2. Y te constiruyes con otros compañeros que quieren trabajar como tú de bien, y lo hacéis y se saca la renovación del concurso y se.lo San a Eulen. Y pasas de ser socia a ser empleada por no se cuanto tiempo. En cuanto puedan te sustituyen.
    En Madrid no se van a constituir EBAs porque los profesionales no se van a apuntar y se van a adjudicar directamente a empresas. La teoría se la eficiencia es preciosa. debiera haber sido y no lo ha sido y va a se excusa para hacer lo que van a hacer.

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